Los pescados y mariscos son altamente perecederos por eso deben de consumirse lo más pronto posible y de preferencia recién sacados del agua. Pero bien sabemos que no siempre es posible conseguir productos tan frescos, por eso te damos los siguientes consejos:
-Al comprar los pescados o mariscos ya congelados, observa bien y evita comprar aquellos que tienen como una capa de hielo en el fondo, ya que puede ser que hayan sido descongelados y vueltos a congelar, ocasionando así un problema a quien los consuma.
-Cuando compres pescados o mariscos congelados, guárdalos inmediatamente y evita que se descongelen hasta antes de cocinarlos.
-Si el pescado es fresco y deseas congelarlo, es necesario limpiarlo completamente retirando las vísceras y escamas antes de guardarlo.
-Para descongelar pescado o mariscos, sácalos del congelador y déjalos a temperatura ambiente o ponlos en la parte más baja del refrigerador, ya que el utilizar agua caliente o tibia puede macerar la carne.
-Los mariscos congelados suelen perder mucho su sabor, por lo que te recomendamos comprarlos frescos el mismo día que se vayan a preparar.
-Cuando vayas de compras al supermercado, siempre deja la selección de productos perecibles y congelados para el final, ya que nos podemos demorar un buen rato en pasar por caja y todavía más en llegar a casa y guardarlos en el refrigerador o congelador.
¡Cuida la salud de tu familia siguiendo estos estas sencillas recomendaciones!